Hay mucho que hacer, ¿nos ayudas?

Dependemos del Obispado de San Isidro.
Somos legalmente, para el Orden Eclesiástico, una vicaría, o sea, casi parroquia.
Somos ante todo una comunidad cristiana católica.
Nos reunimos diariamente a las 19.30 en la Santa Misa a agradecer y a suplicar por todo el mundo.
Los Sábados y los Domingos, también a las 19.30, está toda la comunidad en esas misas y en las q ue oficiamos los domingos a las 11 hs.
Bautizamos nuestros niños todos los sábados a las 15 en punto.
Previamente, Jueves por medio, a las 21 hs. meditamos con los padres y padrinos sobre el Sacramento del Bautismo.
Los Martes a las 21 hs. vienen los novios. Un psiquiatra, Julio Maffei; un médico, Carlos Donazzi y una pareja de alegres y aguerridos esposos, los Guri, juntamente conmigo, vamos meditando y conversando sobre ese misterio del Amor.
María Luisa es la responsable de la catequesis.
Aquí, durante dos años, se prepara a los niños. ¡Pero los catequistas son los padres!...
Reunidos y guiados por una pareja catequista, cada semana, los padres ven lo que transmitirán a sus hijos.
¡Ah! Y está la olla popular. Ese nombre no nos gusta. Lo llamamos “compartir el pan”. Es más cristiano, ¿no es cierto?.
Vienen los hermanos carenciados (unas 250 familias) y los esperamos con una comida rica y sustanciosa. Además les entregamos una bolsa con alimentos como para aliviar nomás la semana. También los esperan un pediatra y dos clínicos. Nos harían falta más abogados y otros especialistas.
Trabaja muchísima gente en esto. Los que traen el pan y los que con amor lo reparten. Aquí los responsables son Carlos y Gabriel. Pero hay mujeres de ánimo muy fuerte y ternura sin límites.
También un grupo movedizo y eficiente de chicos de varios colegios, sobre todo del Vicente López.
Julio Maffei ha implementado (no sé si la palabra calza) un consultorio con profesionales psiquiatras y psicólogos que atienden con eficacia dignísima y eficiencia a quienes necesitan orientación y curación.
Y hay muchachos y chicas que vienen como a su casa.
Y está Teresita Garreda que, con otras personas, casi diariamente, reciben, separan y envían ropa en buen uso, al norte o al sur. Y visten a los que lo necesitan de la olla.
Y están los que cantan en misa.
Y los que se preocupan por la Liturgia para que todo lo referente al culto del Señor sea digno y espiritual.
Irene, Cholita y Viviana, diariamente, atienden en secretaría donde orientan e informan.
Y Graciela y María Cristina que compaginan, ordenan y se mueven para que estas líneas sean claras y lleguen a tiempo.
Y Coco Pando al frente del Consejo Pastoral que lleva la visión de conjunto para ver cómo podemos llevar más allá el conocimiento del Nombre del Señor y la atención de los necesitados.
En lo económico Clara y Yiya no sé cómo se las arreglan para mantener el pan de cada día.
Hay más, pero no hay ni espacio ni tiempo.
Lo que queremos es brindarnos y... ESPERARTE, porque hay mucho que hacer... ¿Vendrás?.

Pablo.